Obertura

Author: Rodrigo D. Granados . /

Cada día empieza el mundo, con o sin nosotros, por eso debemos darnos prisa. Tampoco es elegante tener esperando a miles de millones de personas. Soy puntual, una rara avis en la secular España. Pienso que el tiempo de los demás vale más que el propio, porque no sabemos en qué delicias podrían utilizarlo.
Amanece en los campos; ya han tendido los cables y erguido los cipreses. Me tomo un café y me lío un cigarrillo (aún no ha llegado la prohibición a mi reino), mientras descifro la realidad por la radio. Parece que no van bien las cosas.
Si no fuera por los perros aulladores y su "Prima donna", este sería un lugar muy silencioso por las noches; durante el día es territorio de pájaros: estorninos, mirlos, abubillas.... ¡y las odiosas tórtolas!, con su monótono reclamo o su desabrido grito al volar.
Abro las ventanas de la casa y la mañana lo invade todo; el aire aún espera a los insectos, y los estorninos divierten al cielo con sus piruetas al unísono, como un cardumen de recias anchoas aéreas.

17 comentarios:

alkerme dijo...

Interesante obertura, me liaré mi "excellent" para seguir disfrutando de lo próximo...

Saludos y gracias.

Anónimo dijo...

Yo no encuentro la forma de crear un blog, con una apariencia y un estilo tan elegante y maravilloso..es...precioso...

Y escribe Vd. ....maravilloso.

Pombolita dijo...

Me ha gustado mucho su entrada,¿Rodrigo?.
Muy visual, le ha quedado estupenda.
Me quedaría con: "Parece que no van bien las cosas". Muy elegante.
Es lo que da la distancia...

Rodrigo ¿D.? Granados ¿C.?

Miss.Burton dijo...

Entro y me inunda una paz y una calma propia de ese Edén desde el que ud habla tan bonito. La foto invita a dejarse llevar hasta allí, y a desconectar de esta, mi ciudad, un Madrid cruel a veces, y hermoso, otras, que no nos da tregua, y en el que vivimos todos frenéticamente, sin saber el porqué, pero dejándonos llevar por ese ritmo que nos marca, casi diabólico.
Algún día, yo también tendré mi propio Edén, en el, está ud entre mis adorados, y allí nos encontraremos, para fumarnos un pitillo, reir la vida, o mirarnos y decirnos eso de todo pasará, y voy a chutarme este cielo de colores naranjas en vena a ver si me empapo de su belleza y de esa paz de la que le hablo, que emana esa foto y sus letras.
Un beso fuerte, estoy encantada de conocerle, Sr. Granados.

VolVoreta dijo...

Si sois capaz de erguir los cipreses a horas en que aún no han puesto las calles y liáis un cigarrillo para acompañar un café … yo, sin entender de música (pues sólo soy capaz de sentirla)… este concierto, con semejante obertura, no me lo pierdo por nada del mundo y ya ansío la llegada de mayo para degustar las uvas escuchando cautivada el vuelo de las anchoas.

Te dejo un beso, Rodrigo.

Anónimo dijo...

¡¡¡Está usted en el paraíso!!! ¿Cómo encontró ese lugar?
Es muy cierto eso de que cada día empieza el mundo y que tenemos que darnos prisa...Si sumamos las veces que hemos llegado tarde a disfrutar de lo que está ahí, nos daríamos cuenta de lo que hemos perdido.

Amanecen los campos...

maria varu dijo...

Don Rodrigo no tendría usted un rinconcito para venir a psar un tiempecito? la descripción de ese lugar parece el paraíso, a pesar de las tórtolas...

un saludo que dejo al viento no quisiera alterar la paz

Antígona dijo...

Señor Granados, ¿cómo es que su falta de puntualidad podría tener esperando a miles de millones de personas?

Parecería que fuera usted el dios que cada día da la orden de que amanezca, se tiendan los cables y se yergan los cipreses.

Puede que cada día empiece el mundo con o sin nosotros. Pero decía Derrida que cuando alguien muere, el mundo entero acaba con él.

Los estorninos se enfadarían si supieran que usted los asimila a las feas anchoas :P

Un beso y bienvenido de nuevo

JUANAN URKIJO dijo...

Más que prometedor este delicioso comienzo. Es ya de noche, pero me ha entrado en el pecho un poco de tu mañana...

Felicidad, Rodrigo. A raudales.

cosmofonio dijo...

Un primer post promesa de grandes cosas.

¡Gracias por tu visita!

iliamehoy dijo...

El amanecer siempre promete algo, incluso veteado de cables. Aire limpio, risas frescas, aorma de café y el inmejorable sabor del primer cigarro.
Una sonrisa

Logan y Lory dijo...

Precioso el lugar donde escribes, y precioso el lugar desde donde escribes. Sin duda tus palabras llevan gran dosis de esperanza y buenas -próximas- sensaciones.
!nos vemos!

cristal00k dijo...

:):):) vuelvo en ná!
Una alegría tenerle de nuevo a la vista.
Ah! y gracias`por ese retoque.
Besos!

Trenzas dijo...

Nunca jamás le diré el nombre de mi terapeuta. Ni aún en la hipotética circunstancia de que se arrodillase para suplicarlo.
:)
Aún no tengo el alta completita, pero ya voy despertando. Lo que sí me gusta un montón es que usted no se duerma del todo.
No sufra por las tórtolas. Me las puede enviar, si quiere, y harán compañía a las que me visitan a diario.
Un abrazo muy fuerte, querido amigo.

Alicia dijo...

A pesar de los perros siempre tan escandalosos no parece un mal lugar este donde los pájaros divierten al cielo y aún existe el café acompañado de cigarrillos.
Por un momento me han dado ganas de abandonar la guarida del conejo blanco y acercarme a esos cipreses.
Con su aquiescencia, me asomaré a su ventana de tanto en tanto Rodrigo.

ybris dijo...

¡Rayos y truenos!
Yo, imperdonable traidor, sin comentar en esta entrada.
Tras largo periplo silencioso por los confines de las nieblas, recalo desde acantilados de despedidas en playas de encuentros para comprobar semejanzas que me permitan enlazar una vez más con viejos conocídos.
Podría parecer que es igual en medio de tanto anonimato...
Pues no.
Es que no es lo mismo empezar que seguir.

Abrazos.

Caminante dijo...

Una preciosidad de texto ¡sí sr.!

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